El presidente Gustavo Petro sancionó la ley de ‘divorcio libre’, aprobada recientemente por el Congreso de la República, marcando un hito en la legislación matrimonial del país. A partir de ahora, las parejas podrán separarse de manera unilateral, sin necesidad de justificación específica ni del consentimiento mutuo que antes exigía la ley.
La iniciativa fue presentada en agosto del año pasado, tras ser rechazada en una legislatura anterior. Con esta nueva normativa, uno de los cónyuges podrá solicitar la disolución legal del matrimonio de forma individual. Sin embargo, si la otra parte desea alegar alguna causal, como embriaguez habitual, podrá interponer una demanda de reconvención.
Protección económica y social
La ley también introduce medidas para proteger a los cónyuges en situación de vulnerabilidad económica. La parte económicamente más débil podrá incluir, junto con la solicitud de divorcio, una propuesta de garantía alimentaria y de distribución equitativa de los bienes.
Además, se reforzaron las disposiciones para proteger a las víctimas de violencia intrafamiliar, uno de los problemas más graves en el país. En caso de agresión, el cónyuge responsable deberá indemnizar a su pareja, marcando un paso significativo hacia la justicia para las víctimas.
Con esta normativa, Colombia se suma a la lista de países que promueven el derecho individual al divorcio como una herramienta para garantizar la autonomía y la protección de los derechos fundamentales de las personas dentro del matrimonio.
