El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, endureció este domingo su discurso contra las personas transgénero y anunció una serie de medidas que implementará al asumir el cargo, las cuales incluyen el cierre de fronteras y una histórica operación de deportación.
En un discurso ofrecido en una conferencia conservadora en Phoenix, Trump prometió “detener la locura transgénero” y establecer que “la política oficial de Estados Unidos reconocerá solo dos géneros: hombres y mujeres”. Además, reafirmó su intención de prohibir la participación de personas transgénero en deportes femeninos, asegurando que su administración “mantendrá a los hombres fuera del deporte femenino”.
El magnate también cargó contra los programas de diversidad, equidad e inclusión en instituciones públicas y privadas, calificándolos de innecesarios y perjudiciales.
Migración y seguridad fronteriza
Trump aseguró que, en su primer día en la Casa Blanca, firmará una serie de órdenes ejecutivas destinadas a “cerrar las fronteras” y poner en marcha “la mayor operación de deportación en la historia estadounidense”. Aunque no detalló quiénes serían deportados ni cuándo, destacó su intención de designar a los cárteles de la droga mexicanos como organizaciones terroristas.
“Los que operen en suelo estadounidense serán desmantelados, deportados y destruidos”, afirmó, según declaraciones recogidas por The New York Times. También prometió que el 20 de enero, día en que asumirá el cargo, será “el día de la liberación de Estados Unidos”.
Críticas internas y política exterior
En respuesta a rumores sobre la influencia del empresario Elon Musk, quien formará parte de su gabinete, Trump negó categóricamente que el multimillonario pudiera convertirse en un “presidente de facto”. “Eso no va a suceder. No puede serlo, no nació en este país”, afirmó en alusión al origen sudafricano de Musk.
En cuanto a política exterior, Trump adelantó que podría reunirse con el presidente ruso, Vladímir Putin, al inicio de su mandato para negociar el fin de la guerra en Ucrania. “Tenemos que poner fin a esta guerra”, subrayó, describiendo el conflicto como una prioridad de su futura administración.
Recuperar el Canal de Panamá
En otro momento de su intervención, Trump calificó el Canal de Panamá como un “activo vital” para Estados Unidos y denunció las tarifas impuestas por el país centroamericano como “ridículas”. Aseguró que exigirá su devolución si no se respetan los principios morales y legales del tratado.
“No permitiremos que caiga en manos equivocadas. Si no se respetan los términos de este acuerdo, exigiremos la devolución completa del Canal de Panamá, sin cuestionamientos”, sentenció.
Con su retórica agresiva y promesas de cambio radical, Trump busca consolidar el respaldo de su base conservadora mientras perfila una administración que promete marcar un punto de inflexión en la política estadounidense.