La Ruta de los libertadores volvió a cobrar vigencia en la agenda de los funcionarios del Ministerio del Transporte y del INVIAS. Esto ante los continuos y serios reclamos de los gobernadores por donde pasa esa histórica ruta, quienes con argumentos le manifestaron a la alta funcionaria de Petro lo preocupados que están por los retrasos injustificados de la obra,
En Bogotá se encontraron los gobernadores de Casanare, Boyacá y Arauca quienes pidieron acciones concretas y menos dilaciones del Gobierno Nacional. María Constanza García, la flamante Viceministra del Transporte y Alfonso Latorre, Director del INVIAS, además de reconocer las demoras justificaron el hecho esgrimiendo inconvenientes administrativos con el contratista.
De esta reunión se tomó la decisión de adelantar prontas mesas de trabajo periódicas con el contratista y la supervisión de la obra. Lo que se hable allí debe ser informado oportunamente a la opinión pública.
Integrada por congresistas de Casanare y Boyacá recientemente la Cámara de Representantes designó una comisión accidental, para que le ponga el ojo al asunto.
La Ruta de los Libertadores, incluida en el sonado Pacto Bicentenario del expresidente Ivan Duque, interviene territorios de Casanare y Boyacá. Pasa, entre otras, por localidades como Socotá, Belén, Paz de Ariporo, Socha, Sácama y Hato Corozal, donde 135 kilómetros no están pavimentados.
Además de pavimentar ese largo tramo, el compromiso del Estado es mantener en óptimas condiciones de transitabilidad otros 100 kilómetros. Su costo asciende a los 520 mil millones de pesos, de los cuales la Nación pone 346 mil y el resto los departamentos. Los trabajos se iniciaron al finalizar el 2021 y su tiempo de ejecución va hasta finales del 2029,
