El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a enviar un contundente mensaje contra el narcotráfico en la región al afirmar que estaría de acuerdo con destruir “fábricas de cocaína” en Colombia, así como atacar estructuras de narcotraficantes dentro de México.
Desde la Casa Blanca, Trump fue claro:
“Colombia tiene fábricas de cocaína. ¿Destruiría yo esas fábricas? Me enorgullecería hacerlo. No estoy diciendo que lo vaya a hacer, pero me enorgullecería”.
Las declaraciones del mandatario norteamericano se dan en un contexto donde el narcotráfico sigue expandiéndose en el continente, mientras gobiernos como el de Gustavo Petro han reducido la erradicación, flexibilizado la política antidrogas y enviado señales ambiguas sobre el combate a las mafias.
La postura de Trump revive el debate sobre la cooperación internacional frente al crimen organizado y el impacto real que tendría una estrategia más firme contra los carteles que operan en Colombia y México.












