En un acto que muchos podrían calificar de burla institucional, el presidente Gustavo Petro volvió a designar a Juan Carlos Florián como ministro de Igualdad y Equidad. Así lo confirma el Decreto 1012 del 21 de septiembre de 2025.
Al parecer, la “fluidez” de Florián es tan indispensable que ni un par de meses bastaron para prescindir de sus servicios. Recordemos que el funcionario había sido suspendido como Min Igualdad por la procuraduría, y Petro, en una jugada para evadir la ley de pariedad/cuotas de género, aceptó su renuncia el pasado 17 de septiembre. Los colombianos, entre asombro y resignación, observan cómo el gobierno sigue tomando decisiones que desafían la lógica y, en algunos casos, el sentido común.
Este nombramiento se suma a la larga lista de gestos de Petro que, más que fortalecer la institucionalidad, parecen destinados a mantener al país entretenido… o confundido. Algunos analistas no descartan que la verdadera igualdad buscada por el ministerio se mida en risas por minuto y no en políticas concretas.
Mientras tanto, los ciudadanos se preguntan si esta “fluidez” será suficiente para enfrentar los retos de equidad que el país necesita, o si todo quedará, como siempre, en un elegante decreto sin resultados tangibles.
