El presidente Gustavo Petro ha desmentido las acusaciones de que envió 30 millones de dólares al régimen de Nicolás Maduro a través de la empresa Monómeros. En respuesta a las publicaciones que afirmaban lo contrario, Petro calificó la información de “mentira” y acusó a varios medios de comunicación, incluidos El Colombiano y Vanguardia, de difundir calumnias.
El mandatario explicó que la decisión de entregar Monómeros a su filial en Venezuela, Pequivén, fue tomada para evitar que la empresa fuera mal gestionada por funcionarios del gobierno anterior y el gobierno interino de Juan Guaidó. Según Petro, esta acción fue un éxito para Colombia, ya que permitió reactivar la operación de compra de urea a precios más bajos y evitar el cierre de la empresa ubicada en Barranquilla.
Petro también criticó a los medios que informaron sobre el tema y reafirmó que la transferencia de Monómeros a Pequivén no resultó en el envío de dinero al régimen venezolano, sino que trajo beneficios económicos a Colombia.
Durante el periodo en que Petro asumió la presidencia, se nombró a Rodrigo Ramírez Salazar y Cristóbal Padilla en la junta directiva de Monómeros. Ramírez, vinculado a Nicolás Petro y con problemas legales por supuestos enriquecimientos ilícitos, ha sido señalado en varios escándalos. Además, se mencionan viáticos significativos y contratos con empresas extranjeras que han generado controversia.
Este episodio se suma a las críticas sobre la gestión de Petro y su gobierno, especialmente en relación con la transparencia y el manejo de recursos estatales.