El congresista de oposición le respondió al mandatario luego de que Petro criticara que miembros de ese partido hablaron con organismos internacionales.
En los últimos días cuatro miembros del partido Centro Democrático llegaron hasta Washington, Estados Unidos, a conversar con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y la Organización de Estados Americanos (OEA), para sentar su posición frente a lo que está ocurriendo en el país, especialmente en medio de la elección del próximo Fiscal General de la Nación.
El presidente Gustavo Petro los cuestionó y, desde el partido, el representante Christian Garcés le hizo un fuerte reclamo al mandatario. Le recordó los líos jurídicos que tienen personas cercanas a él; y el discurso de ‘paz total’ que ha dado el presidente dentro y fuera del país.
¿Qué opina de las críticas que hizo el presidente Gustavo Petro al viaje que hicieron colegas de su partido a Washington?
CHRISTIAN GARCÉS (C.G.): Son una demostración más del nivel tan bajo que tenemos en el liderazgo del Presidente de la República, al tratar de esa forma a la oposición cuando tenemos no solamente el derecho constitucional, sino la libertad, de poder expresarnos ante líderes y organismos nacionales e internacionales. Es la posición de un tirano que busca cercenar la expresión de quienes piensan diferente a él.
Por otro lado, el tal cambio que le prometieron al pueblo colombiano no se ve. Cada vez que cometen un error leve o grave la excusa es que en el pasado también lo hacían, lo cual es totalmente reprochable porque estamos todos los colombianos en función de mejorar, no de mantener el status quo. La manera de debatirle a la oposición, al fiscal, a la procuradora y a otros es acusándolos, desprestigiándolos, cuestionándolos.
En la plenaria de la Cámara usted recordó los líos jurídicos de Nicolás Petro para responderle al presidente, dijo que “pareciera que estuviera hablando de su hijo”, ¿qué quiso decir?
C.G.: El presidente acusa a la oposición de querer mantener genocidios, narcotráfico y corrupción cuando, precisamente, su hijo en videos que son de público conocimiento y en audios de su exesposa dieron a conocer que tuvieron vínculos con personas relacionadas con el narcotráfico durante la campaña. Está, además, acusado de enriquecimiento ilícito, lavado de activos, entre otros delitos. Por el otro lado, hay una investigación por documentos que son públicos de una posible triangulación corrupta entre Fecode, el partido del presidente y la campaña Petro Presidente, donde se cometieron delitos penales electorales. Entonces el presidente debería salir a respetar la Constitución, la ley, a la oposición, a la institucionalidad y a aclarar las situaciones por las cuales se le acusa e investiga a su círculo cercano, en vez de salir con estas destempladas declaraciones.
C.G.: El presidente Petro desde Múnich, Alemania, dijo que su discurso se centra en la paz, ¿cree que es así?
C.G.: El presidente tenía ya un reto suficientemente grande, casi incumplible, que son los acuerdos de La Habana. Él mismo aceptó ya estando elegido que no había el presupuesto y ahora nos mete a todos en una ‘paz total’, pero con criminales que han vivido del narcotráfico, de la extorsión, del secuestro y no han tenido una ideología diferente que ganar dinero de manera ilícita. Se está estrellando, pero no recompone el rumbo mientras que en regiones como la mía se profundiza la violencia.
La semana pasada en el municipio de La Unión y en el El Toro, Valle, asesinaron a dos empleados de comerciantes que no se prestaron para pagar extorsiones. Los asesinatos de líderes sociales y políticos continúan. En Tuluá asesinaron al concejal más cercano del alcalde, no alcanzó a posesionarse; y las masacres continúan en Colombia y el presidente pareciera que está dedicado a darles espacio a ellos, para que sigan fortaleciéndose a los grupos criminales militar y económicamente.
SEMANA: ¿El país va rumbo a la ‘paz total’?
C.G.: La única forma de lograr la paz total en nuestro país es que llevemos oportunidades de ingreso y empleo a las zonas rurales de nuestro país, al mismo tiempo que nuestra Fuerza Pública enfrente a los grupos criminales, pero la propuesta del presidente es ofrecerle a criminales y narcos tan sangrientos beneficios para que, supuestamente, dejen las armas, cuando ya sabemos que en el mejor de los casos vuelve y se repite la historia de las Farc, donde serán reemplazados por otros criminales dispuestos a ganarse la vida por la violencia de manera ilícita. Es como si repitiéramos la receta de los acuerdos de La Habana que está hoy fracasando. Duque no logró llenar los espacios que dejó las Farc y por eso nosotros denunciamos que no había ni los presupuestos, ni la capacidad institucional de hacer los acuerdos de La Habana y ahora vuelven a meter al país en la misma dinámica fracasada.
El presidente debería volcarse a generar emprendimiento, ayudar a crecer las empresas, crear nuevas, apoyar a todo el sector productivo en la reactivación económica, pero se enfoca es en debilitar la institucionalidad, pública y privada, y beneficiar a grupos criminales. Las informaciones que se tienen hoy es que sí hubo acuerdos del hermano en La Picota con extraditables y acaba de decir el vocero del ELN, Pablo Beltrán, que la cúspide fue el “estallido social” que había que seguir apoyando la movilización.
Es claro que todo el fortalecimiento del pacto en el Congreso y haber ganado la Presidencia, lo trabajaron desde el tal “estallido social” y el vandalismo que hubo, aprovechándose de la pobreza que nos dejó la pandemia. El presidente se debería poner de lado de los colombianos honestos, no de los criminales y respetar a la oposición.
Redacción. R.S.
