El presidente Gustavo Petro se prepara para anunciar un importante remezón en su gabinete ministerial la próxima semana, afectando a varios de sus principales ministros. Según fuentes cercanas al gobierno, los ministros de Interior, Salud, Educación, Vivienda, Defensa y Hacienda se encuentran en la cuerda floja. Entre las principales razones para esta sacudida se mencionan escándalos de corrupción y una pobre ejecución presupuestal.
Luis Fernando Velasco, Ministro del Interior, ha sido uno de los más cuestionados. Su gestión ha sido criticada por no lograr articular con efectividad las reformas impulsadas por el gobierno y por manejar inadecuadamente los asuntos políticos internos, lo que ha debilitado la capacidad de negociación del ejecutivo en el Congreso.
En el Ministerio de Salud, Guillermo Jaramillo también enfrenta duras críticas. Su gestión ha sido marcada por controversias sobre la implementación de la reforma de salud, una de las principales apuestas del gobierno de Petro. La falta de claridad y ejecución de esta reforma ha generado descontento tanto en la ciudadanía como en el sector salud, aumentando la presión para su posible salida.Aurora Vergara, Ministra de Educación, se encuentra en una situación similar. Su gestión ha sido evaluada como ineficaz, especialmente en la implementación de políticas que buscan mejorar la calidad educativa y reducir las desigualdades en el acceso a la educación. La falta de avances significativos en estas áreas ha generado cuestionamientos sobre su continuidad en el cargo.Catalina Velasco, Ministra de Vivienda, también está bajo escrutinio debido a la baja ejecución presupuestal en proyectos de vivienda social, una de las prioridades del gobierno para mejorar las condiciones de vida de las poblaciones más vulnerables. La lentitud en la entrega de viviendas y la falta de resultados concretos han llevado a considerar su reemplazo.
El Ministro de Defensa, Iván Velásquez, enfrenta críticas por su manejo de la seguridad nacional. A pesar de sus esfuerzos por reformar las fuerzas armadas y mejorar la seguridad en el país, los resultados no han sido los esperados, y la percepción de inseguridad sigue siendo alta entre los ciudadanos.
Finalmente, el Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha sido cuestionado por su gestión económica en un contexto de creciente inflación y desaceleración económica. Las políticas económicas implementadas no han logrado estabilizar la situación económica del país, lo que ha generado incertidumbre y descontento en diversos sectores.
Este remezón ministerial se anticipa antes del inicio de la nueva legislatura el 20 de julio, en un intento por fortalecer las políticas públicas del gobierno de Petro y asegurar un mayor apoyo en el Congreso. La expectativa es que estos cambios permitan una gestión más eficiente y efectiva, alineada con los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo.
Este movimiento en el gabinete de Petro refleja la necesidad de ajustes internos para consolidar su agenda y responder a las crecientes demandas y expectativas de la ciudadanía. El anuncio oficial se espera en los próximos días, lo que podría marcar un nuevo rumbo en la administración del presidente Petro.