Información exclusiva de SEMANA revela detalles clave sobre las operaciones financieras de uno de los principales estrategas económicos de las extintas Farc.
Juvenal Ovidio Ricardo Palmera Pineda, conocido como Simón Trinidad, se destacó como el cerebro financiero de las Farc, organización guerrillera en la que optimizó recursos provenientes de actividades ilícitas. Economista de profesión y oriundo de una familia adinerada del norte de Colombia, Trinidad utilizó su formación académica y habilidades empresariales para manejar los millonarios ingresos del narcotráfico, contrabando de armas y secuestros.
Aunque no se le reconoció como un estratega militar, su capacidad para administrar recursos y negociar acuerdos lo posicionó como una figura clave dentro de la organización. Sin embargo, su origen de clase alta generó desconfianza entre los líderes del secretariado, quienes le impidieron acceder a los círculos más exclusivos de la guerrilla.
Un estratega financiero al servicio de las Farc
Su influencia aumentó al asumir el liderazgo del Bloque Caribe, una región estratégica para las Farc por la producción y exportación de cocaína. Según fuentes de inteligencia militar consultadas por SEMANA, Trinidad optó por convertir los ingresos ilícitos en activos como oro, una decisión que evitaba pérdidas por humedad y minimizaba los riesgos asociados con las caletas de dinero.
Sin embargo, esta estrategia no estuvo exenta de problemas. Operativos del Ejército Nacional en zonas como La Macarena, Meta, resultaron en la incautación de millones de dólares, lo que expuso las vulnerabilidades en su sistema financiero.
Durante los diálogos de paz con el gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002), Trinidad se convirtió en una de las voces más visibles y mediáticas de la guerrilla. Pero el fracaso de las negociaciones lo llevó de nuevo a la clandestinidad, esta vez con un foco particular en Ecuador.
Las multimillonarias inversiones en Ecuador
Informes de inteligencia militar, obtenidos en exclusiva por SEMANA, indican que Trinidad diversificó los recursos de las Farc a través de inversiones en bienes raíces, acciones en bolsa, transporte marítimo y obras de arte. Estas operaciones le permitieron mover grandes sumas de dinero turbio hacia actividades aparentemente legales.
El seguimiento a sus movimientos reveló reuniones con empresarios, banqueros e inversionistas en Ecuador, donde consolidó una red financiera que posteriormente sería desmantelada tras su captura en 2004. Este arresto, que resultó en su extradición a Estados Unidos, marcó el fin de su carrera activa dentro de las Farc. Actualmente cumple una condena en ese país.
Un tesoro de mil millones de dólares
Fuentes de inteligencia aseguran que Simón Trinidad posee información clave sobre los activos financieros de las Farc, con un valor estimado en cerca de mil millones de dólares. Algunos exintegrantes de la guerrilla han afirmado ante las autoridades que existe presión política para gestionar su regreso a Colombia, motivada por el acceso a esta información privilegiada.
La historia de Simón Trinidad evidencia el sofisticado manejo de recursos ilícitos dentro de las Farc, así como el impacto de sus decisiones financieras en el fortalecimiento de la organización guerrillera. La búsqueda de sus activos y la información que aún guarda continúan siendo temas de interés para las autoridades y la comunidad internacional.