Las autoridades investigan nuevas hipótesis en torno a los hechos ocurridos la noche del jueves 1 de mayo en el corregimiento de Tilodirán, en Yopal, donde perdieron la vida Mónica Andrea Moreno Ibáñez y su excompañero sentimental Rubén Darío Estupiñán Cuéllar. Aunque inicialmente se creyó que se trataba de un feminicidio seguido de suicidio, los más recientes avances de la investigación apuntan a la posible intervención de una tercera persona en el crimen.
Según fuentes judiciales, los indicios recopilados hasta el momento sugieren que otra persona habría sido la responsable de accionar el arma de fuego. De acuerdo con versiones preliminares, Mónica habría sido la primera víctima y Rubén Darío habría intentado huir antes de ser impactado por la espalda.
En un principio, algunos allegados de Mónica Andrea señalaron a Estupiñán Cuéllar como el presunto autor, dado que la relación entre ambos había estado marcada por conflictos recientes, denuncias por violencia y amenazas. Sin embargo, tras un análisis más detallado de la escena, la Policía en Casanare considera nuevas líneas investigativas.
El cuerpo de Mónica fue hallado dentro de un establecimiento comercial que ella atendía. La zona fue acordonada tras la inspección inicial, pero solo hasta la madrugada del día siguiente, a escasos metros del primer hallazgo, fue encontrado el cuerpo sin vida de Rubén Darío, quien era conocido en la comunidad por su labor como entrenador deportivo.
La familia del hombre asesinado sostiene que no se encontró arma alguna en el lugar de los hechos, lo que refuerza la teoría de que un tercero habría perpetrado los disparos. Además, el cuerpo de Rubén presentaba múltiples impactos de bala, lo cual también pone en duda la versión inicial.
Las autoridades continúan recopilando pruebas y testimonios para esclarecer este lamentable suceso que ha conmocionado a la comunidad de Tilodirán.