Gustavo Petro volvió a dejar en claro que no se conforma con incendiar la política en Colombia: ahora quiere prenderle fuego al Medio Oriente.
El presidente de Indonesia, Prabowo Subianto, aceptó la descabellada propuesta del mandatario colombiano de conformar un supuesto “ejército de la humanidad” con aval de la ONU para “liberar a Palestina” del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
En palabras simples: Petro lanzó un grito de guerra y ya encontró quien lo escuche. Indonesia estaría dispuesta a mandar 20 mil soldados al Medio Oriente, con la excusa de “preservar la paz”, aunque a todas luces esto huele más a ensayo general de la Tercera Guerra Mundial.
El anuncio coincide con los reclamos del presidente de Yemen, que también quiere poner tropas en la misma “fuerza de paz” que suena más a cruzada política que a diplomacia real.
Lo irónico es que, mientras Colombia lidia con hospitales quebrados, inseguridad desbordada y un presidente que perdió hasta la visa de EE.UU., Petro se autoproclama general en jefe de un ejército mundial que nadie pidió.
La pregunta que queda es: ¿Petro está defendiendo la paz… o solo buscando su próxima foto histórica para el álbum del mesías progresista?
