A escasos cinco días de que se venza el plazo para que la Superintendencia de Salud defina la suerte de nuestra EPS Capresoca, en los círculos de Casanare existe incertidumbre por lo que ya sucedió con otras EPS que estaban en similares condiciones y que fueron liquidadas.
La entrevista que el día anterior entregó a DF CASANARE el gobernador de Casanare Salomón Sanabria dejo ese sin sabor pues al parecer al interior de la Superintendencia ya se habría tomado una decisión contraria a los intereses del departamento. No obstante, las directivas de la entidad haber hecho todo y haber cumplido las exigencias de ese organismo de vigilancia.
La situación es bien compleja pues no solo son los 170 mil afiliados que no tienen certeza de quien habrá de asumir el servicio de salud en caso de que se dé una liquidación, sino el desastre laboral que ocurriría en nuestro departamento, esto en razón a la cantidad de familias que de manera directa o indirecta dependen de la entidad, que a lo largo de 40 años le ha prestado los servicios de seguridad social a las gentes de nuestro departamento.
Casanare de ser así recordara que en el Gobierno de Gustavo Petro acabaron con una de las entidades más queridas del departamento.
