SEMANA confirmó la noticia con fuentes federales. Feria es acusado por peculado, abuso de función pública y constreñimiento ilegal, en medio del polémico polígrafo y las interceptaciones a la exniñera Marelbys Meza.
El polémico coronel Carlos Feria, quien se desempeñaba como jefe de seguridad de la Casa de Nariño y fue nombrado el pasado 4 de mayo como agregado policial en la Embajada de Colombia en Estados Unidos, tendrá que abandonar Washington en las próximas horas.
SEMANA confirmó, con fuentes federales, que Estados Unidos le dio un ultimátum para que abandone ese país y el plazo vence el próximo 2 de julio.
La decisión de la Casa Blanca se produce casi un mes después de que la congresista republicana María Elvira Salazar le enviara una carta al secretario de Estado, Marco Rubio, en la que le pedía negarle las credenciales a Feria.
“El coronel Carlos Alberto Feria Buitrago no debe ser permitido para trabajar en la Embajada colombiana en Washington, D. C.; se le deben negar las credenciales diplomáticas y ser enviado de regreso a Colombia para que enfrente la justicia”, había dicho Salazar.
Para la congresista Salazar, quien es una de las voces más relevantes en el Congreso norteamericano sobre América Latina, se trata de un “desarrollo muy preocupante en la Embajada de Colombia en Washington, D. C.”.
Salazar describió a Feria como “un hombre que ha llegado para ser el nuevo agregado policial”, pero que en “realidad debería estar en Colombia enfrentando un juicio y cooperando con los fiscales”.
“El coronel Feria fue un actor clave en el encubrimiento de un caso de corrupción importante”, resaltó en su carta Salazar.
La congresista incluso escribió que Feria fue enviado a Washington no solo para hacerles el quite a sus procesos judiciales, sino para, posiblemente, no revelar “información perjudicial para el presidente Petro y otros miembros de su administración”.
Feria es investigado en el escándalo por las interceptaciones y chuzadas a Marelbys Meza, y había sido “premiado” por Petro con dicho cargo diplomático en Washington.
Esto, luego de que Meza narrara el maltrato y las persecuciones que había vivido de parte de funcionarios de la Casa de Nariño que, incluso, la habían llevado a un sótano adyacente a la casa presidencial para hacerle una prueba con polígrafo, sin cumplir los requisitos legales para tal fin.
La situación jurídica del coronel Feria, quien era el jefe de Seguridad de la Casa de Nariño, es complicada.
En su momento, SEMANA conoció las 27 páginas del documento que redactó la Fiscalía para insistir en que el oficial fue quien dio la orden para que Marelbys Meza fuera sometida a una prueba de poligrafía, cuyo único objetivo era conocer el paradero del dinero en efectivo hurtado del apartamento de la entonces jefa de gabinete del Gobierno nacional, la hoy canciller Laura Sarabia.
“Laura Sarabia le notificó a su empleada Marelbys Meza sobre la realización de la prueba de polígrafo para el día siguiente, al tiempo que, por disposición del coronel Feria, se transmitió la orden para el sometimiento de prueba de polígrafo y el relevo de varios funcionarios del esquema de seguridad”, se desprendió de uno de los apartes del documento del ente acusador.
“El coronel Carlos Alberto Feria Buitrago, indebidamente, permitió que sus subalternos usaran bienes del Estado que se habían confiado en razón a su cargo y funciones bajo la custodia de la dependencia que él dirigía para realizar la prueba poligráfica a Marelbys Meza“, narró la Fiscalía.
Sumado a ello, indicó: “Se logra inferir que el coronel Carlos Alberto Feria Buitrago estuvo al frente y dispuso las acciones encaminadas a contactar al órgano investigativo para iniciar las indagaciones, como también ordenando el sometimiento a la prueba poligráfica”, señala la acusación.
Finalmente y sobre el escrito de acusación contra Feria, la Fiscalía advirtió en su momento que está dispuesta a obtener una condena contra el coronel Feria y sus subalternos con una hipótesis simple, pero contundente: todos sabían lo que hacían y respondían a las órdenes del jefe de seguridad del presidente Gustavo Petro.
