Durante su intervención, el mandatario reiteró el llamado que ya había hecho a los militares estadounidenses para que desobedezcan órdenes que, según él, atenten contra la Constitución o contra la humanidad.
“Pero cuando una orden de un presidente, cualquiera que sea, de cualquier parte del mundo, va en contra de la constitución de su propio país o en contra de la humanidad (…), ningún militar debe obedecer ese tipo de órdenes”, afirmó Petro.
Las declaraciones del presidente vuelven a encender el debate sobre su insistencia en enviar mensajes a las Fuerzas Militares de otros países, un gesto que sectores políticos consideran improcedente y que podría tensar relaciones diplomáticas.












