Las autoridades han calificado el atentado como un acto de terrorismo inspirado en el grupo Estado Islámico.
El FBI confirmó este jueves, 2 de enero, que Shamsud-Din Jabbar, un veterano del Ejército de los Estados Unidos y ciudadano estadounidense oriundo de Texas, actuó solo en el ataque perpetrado la noche de Año Nuevo en Nueva Orleans. Esta declaración contradice la hipótesis inicial de que el atacante pudo haber contado con cómplices para llevar a cabo el mortal atentado que dejó 15 muertos y decenas de heridos.
Jabbar embistió con una camioneta a una multitud que celebraba en el Barrio Francés, una zona emblemática de la ciudad. Además, las autoridades revelaron que colocó dos bombas artesanales en Bourbon Street y en una calle cercana, como parte de un ataque premeditado que describieron como «malvado y deliberado».
Publicaciones en redes sociales y vínculo con el Estado Islámico
Horas antes del atentado, Jabbar publicó cinco videos en su cuenta de Facebook en los que expresaba su apoyo al grupo Estado Islámico. En los videos, afirmó haberse unido a la organización militante el verano pasado y justificó sus intenciones homicidas.
“Recuperamos imágenes de cámaras de vigilancia que muestran a Jabbar colocando los artefactos explosivos en las ubicaciones donde fueron encontrados”, explicó Christopher Raia, subdirector de la división de contraterrorismo del FBI, durante una rueda de prensa. Raia reiteró que el ataque fue claramente un acto de terrorismo inspirado por la ideología del grupo extremista.
Evidencias y acción policial
Dentro de la camioneta utilizada en el ataque, los investigadores encontraron una bandera negra del Estado Islámico, armas y un posible artefacto explosivo improvisado. Jabbar fue abatido a tiros por agentes de la policía y el FBI tras el atentado.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue informado sobre el caso y condenó el ataque, calificándolo como un acto de odio. “Es desgarrador ver cómo este tipo de ideologías siguen cobrando vidas inocentes”, expresó el mandatario.
Víctimas identificadas
Entre las víctimas mortales se encuentra Nikyra Cheyenne Dedeaux, una estudiante de 18 años que había viajado a Nueva Orleans para celebrar el Año Nuevo con amigos. También fallecieron Reggie Hunter, un administrador de 37 años y padre de dos hijos, originario de Baton Rouge, y Tiger Bech, exjugador de fútbol americano de la Universidad de Princeton.
El atentado ha dejado una profunda huella en Nueva Orleans y el país entero, mientras las autoridades trabajan para esclarecer todos los detalles y reforzar las medidas de seguridad en eventos públicos masivos.

