El Presidente ternó a Gregorio Eljach para atajar a Germán Vargas Lleras, pero eso no le impidió darle la razón al barranquillero, su gran opositor en el Senado.
La caída de la Ley de Financiamiento en diciembre del año pasado desató una tormenta política que, a su vez, dio lugar a que Efraín Cepeda, el actual presidente del Senado, se convirtiera en uno de los opositores más visibles en el Congreso del presidente Gustavo Petro. El dirigente conservador oriundo de Barranquilla se opuso al proyecto desde el primer momento y fue el encargado de liderar los esfuerzos para tumbarlo, algo que motivó críticas de parte del Presidente Petro que escalaron tanto que incluso llevaron al procurador Gregorio Eljach a jalarle las orejas.
Todo se dio a partir de un discurso en el cual el presidente Petro criticó a los mandatarios locales que se han quejado por la falta de financiamiento para grandes obras como el Metro de Bogotá o el Túnel del Toyo. En este, Petro aseguró que la falta de recursos fue provocada por la caída de la Ley de Financiamiento y señaló como culpable a Efraín Cepeda, quien, a su parecer, “se tiró a Colombia”.
Estas palabras fueron interpretadas como un ataque directo al Congreso y una afrenta a la separación de poderes y tuvo que salir a mediar públicamente el procurador Gregorio Eljach, quien no dudó en darle la razón al presidente del Senado, Efraín Cepeda. Le recordó y en recordarle a Petro que debe “respetar el espacio donde elabora y donde deciden las otras ramas” y que “para eso hay formas de diálogo”.
El procurador Gregorio Eljach también se pronunció sobre la petición que le hizo la Ministra de Ambiente, Susana Muhamad, de revisar las decisiones del procurador delegado Gustavo Guerrero, quien ha sido el encargado del lío con del Muelle 13 de Buenaventura. Eljach le advirtió a la Ministra de Ambiente y al Presidente Petro que él actúa con base al reglamento y no a alaridos.
Esta es la primera vez en los 15 días que lleva en la Procuraduría que Gregorio Eljach, el exsecretario general del Senado, se desmarca de las posiciones del Presidente, quien fue el encargado de incluirlo en la terna de la que resultó saliendo victorioso con facilidad. A pesar de que nunca ha sido cercano al proyecto del Pacto Histórico, en Palacio se decidió que su nombre era el único que se podía imponer a Germán Varón Cotrino y a Luis Felipe Henao, dos hombres cercanos a Cambio Radical y a Germán Vargas Lleras. Jugada para la que fueron claves el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo y la entonces directora del Dapre y actual canciller Laura Sarabia.
No es el primer funcionario que llega a un alto cargo tras ser ternado por Petro y que luego se desmarca
La Defensora del Pueblo, Iris Marín, ya lo ha hecho hasta en tres ocasiones: una por el regreso de Armando Benedetti a su círculo cercano, otra por la designación de jefes paramilitares como gestores de paz y la más reciente por la crisis en el Catatumbo.
