Mientras la opinión pública se concentra en temas internacionales y políticos, en Colombia se denuncia un drama silencioso: el genocidio contra la población con enfermedades raras.
De acuerdo con cifras presentadas este martes en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, por parte de Yeyson Maximiliano, director de la Federación Colombiana de Enfermedades Raras (Fecoer), en los últimos ocho meses han fallecido más de 1.500 pacientes debido a la falta de acceso a medicamentos y tratamientos.
La crisis, asegura Fecoer, es producto del ahogo financiero del sistema de salud y de la falta de garantías estatales para la atención de esta población vulnerable.
“El desabastecimiento y las demoras en la entrega de medicamentos vitales están costando vidas todos los días. Los pacientes con enfermedades raras se están muriendo en medio de la crisis financiera y la incertidumbre que genera la reforma a la salud”, advirtió el dirigente.
Los testimonios expuestos en el debate señalan que esta situación obedece a la política de manejo del sistema que impulsa el Gobierno Nacional, encabezado por el presidente Gustavo Petro, y que, según denuncian, está cobrando vidas en lugar de garantizar derechos.
Fecoer hizo un llamado urgente al Congreso, al Gobierno y a los entes de control para que se tomen medidas inmediatas que permitan salvar vidas y asegurar que la reforma a la salud no normalice esta crisis.