La decisión refleja el deterioro sostenido de la red hospitalaria nacional, obligada a suspender servicios clave por falta de recursos y sostenibilidad operativa
La decisión fue comunicada internamente a sus colaboradores mediante un documento oficial firmado por el gerente de la institución -crédito Mauricio Dueñas Castañeda/EFE
Colombia atraviesa una de las peores crisis en su sistema de salud en décadas. Las deudas acumuladas entre EPS e IPS, el retraso en los giros presupuestales, el desfinanciamiento de hospitales públicos y privados, y la incertidumbre frente a la implementación de una reforma estructural han generado un ambiente de inestabilidad que amenaza la continuidad de servicios esenciales.
Esta situación ha llevado a que clínicas y hospitales en todo el país anuncien recortes, suspensión de servicios o incluso cierres temporales, con efectos directos sobre millones de pacientes que dependen del sistema público y subsidiado de salud.
En ese contexto, otra clínica anunció el cierre de los servicios de urgencias. Se trata de la Fundación Clínica del Norte en Antioquia, que informó a sus colaboradores, mediante un comunicado interno, que dicho servicio será cerrado temporalmente a partir del próximo 25 de julio.