Los carrotanques involucrados en el escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) permanecen varados, acumulando polvo. La Procuraduría General de la Nación está mediando para que se les otorguen las pólizas de aseguramiento necesarias.
Este contrato, que superó los 46.000 millones de pesos, ha estado marcado por múltiples irregularidades y problemas. Debido a estos antecedentes, las aseguradoras se han negado a emitir las pólizas requeridas. La situación ha llevado a la UNGRD a una crisis, ya que los 40 carrotanques adquiridos para La Guajira, a precios inflados y con presuntos direccionamientos en el proceso de contratación, representan no solo un despilfarro de recursos públicos, sino también un obstáculo crítico en la gestión del riesgo en la región.