El expresidente Álvaro Uribe Vélez anunció que presentará una tutela tras la decisión de la justicia de negar su recusación contra el fiscal Gilberto Villarreal, quien lidera el caso en su contra por presunto soborno y fraude procesal. Uribe alega que Villarreal ha actuado con parcialidad y hostilidad hacia él, lo que compromete la imparcialidad del proceso. Argumenta que, a pesar del traslado del fiscal, su juicio continúa bajo estas circunstancias, lo que considera una violación de sus derechos fundamentales.
Uribe sostiene que Villarreal favoreció a sus antiguos superiores, Luis Eduardo Montealegre y Jorge Perdomo, y que mostró conductas inapropiadas durante las audiencias, como demostrar ira hacia él, lo cual fue incluso reprendido por la juez. A pesar de que Villarreal ya no está a cargo del caso, Uribe insiste en que la recusación debería proceder para garantizar un juicio justo.
El exmandatario niega las acusaciones de amenazas de muerte contra Villarreal y cuestiona la imparcialidad del proceso judicial. Ha solicitado a sus abogados que interpongan una tutela para defender sus derechos y asegurar un proceso imparcial.