El exgeneral venezolano, hoy preso en EE. UU., asegura que el régimen de Maduro utilizó la droga como arma y desplegó redes criminales en Estados Unidos.
Hugo Carvajal Barrios, exdirector de Inteligencia Militar de Venezuela y figura clave en los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, envió una carta explosiva al presidente Donald Trump, revelando la supuesta profundidad de la vinculación del régimen venezolano con el crimen organizado y el narcotráfico internacional.
Según el periódico Dallas Express, Carvajal sostuvo que Venezuela habría utilizado la cocaína como instrumento de presión y que mantuvo colaboración con grupos armados como las Farc, el ELN, los servicios de inteligencia cubanos y hasta Hezbolá.
“Hoy veo la necesidad de hablar con el pueblo estadounidense sobre la realidad del régimen venezolano y por qué las políticas del presidente Trump no solo son correctas, sino absolutamente necesarias para la seguridad nacional de Estados Unidos”, señaló el exgeneral en su misiva.

Carvajal acusó al gobierno de extender redes criminales hacia Estados Unidos, incluyendo al Tren de Aragua y al Cartel de los Soles. “Fui testigo personal de cómo el gobierno de Hugo Chávez se convirtió en una organización criminal que ahora está dirigida por Nicolás Maduro, Diosdado Cabello y otros altos funcionarios del régimen”, afirmó.
El exmilitar indicó que Chávez habría ordenado el reclutamiento de líderes criminales dentro y fuera de las cárceles para “defender la revolución a cambio de impunidad”. Asimismo, advirtió que, tras la política de fronteras abiertas de la administración Biden-Harris, agentes del régimen venezolano aprovecharon para infiltrarse en EE. UU., incluidos organismos de carácter militar.
“Las drogas que llegaron a sus ciudades por nuevas rutas no fueron producto de la corrupción ni obra de narcotraficantes independientes; fueron políticas deliberadas coordinadas por el régimen venezolano contra Estados Unidos”, aseguró Carvajal.
El exgeneral, quien espera sentencia en Estados Unidos, también denunció que miembros de la oposición venezolana han sido utilizados como espías y que por aproximadamente veinte años el régimen habría infiltrado instituciones estadounidenses.












