Una investigación reveló que las disidencias de las Farc tendrían un alto nivel de infiltración en instituciones como la Fiscalía, el Ejército, la Policía y agencias de inteligencia del Estado. La información proviene de computadores, celulares y memorias USB incautadas a jefes de estas estructuras el 23 de julio de 2024 en un retén militar en Anorí, Antioquia.
Entre los documentos aparece un correo del 8 de febrero de 2024 en el que alias ‘Calarcá’, jefe del Estado Mayor de Bloques y Frentes (EMBF), instruye una reunión con un oficial identificado como el general retirado Juan Miguel Huertas, hoy jefe del Comando de Personal del Ejército. Según la información, el oficial habría propuesto crear una empresa de seguridad fachada para facilitar movilidad en vehículos blindados y porte de armas legales a integrantes de las disidencias. También habría ofrecido protección en desplazamientos y asegurado tener vínculos con el presidente Gustavo Petro para evitar controles.
La investigación recuerda que Huertas fue retirado en 2022 y luego apoyó la campaña presidencial del hoy mandatario, quien lo reincorporó al Ejército el 6 de agosto.
Otro funcionario mencionado es Wilmar Mejía, un licenciado en educación física que en el actual gobierno se convirtió en un agente de inteligencia del Estado por su cercanía con Petro.
La información estaría en manos de la fiscal general Luz Adriana Camargo, quien no habría investigado el material y, el día de la incautación, ordenó la liberación de cuatro guerrilleros detenidos, entre ellos alias ‘Calarcá’, argumentando que eran gestores de paz.
También se revelan conversaciones entre jefes de las disidencias sobre un supuesto apoyo a la campaña presidencial de Petro en 2022, que según un chat con alias Iván Mordisco, se habría hecho “a través de Francia Márquez”. El propio Mordisco ya había afirmado en marzo que su grupo apoyó la campaña.












