Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, cabecilla del Estado Mayor Central (EMC) de las disidencias de las Farc, reapareció públicamente luego del bombardeo militar ocurrido en Guaviare, donde murieron veinte personas, entre ellas siete menores de edad reclutados por ese grupo armado ilegal.
En un video, el delincuente anunció que “evaluará juicios revolucionarios contra los responsables materiales e intelectuales del asesinato de niños”, intentando responsabilizar al Estado por la muerte de menores que su propia estructura criminal había reclutado para la guerra. También amenazó a “los gobernantes que desde sus sillones promueven la guerra, el militarismo, los bombardeos”, en un mensaje de intimidación directa al Gobierno y a la Fuerza Pública.
El Instituto Nacional de Medicina Legal confirmó que el operativo militar se desarrolló en la madrugada del 11 de noviembre en zona rural del municipio de Calamar, Guaviare, en el sector de San Lucas. El objetivo era un campamento del frente primero de las disidencias, estructura señalada de sembrar el terror en el sur del país. Según el informe forense, las 20 personas fallecidas fueron trasladadas a sedes de Villavicencio y San José del Guaviare, donde se identificaron plenamente 16 de ellas y 4 mediante carta dental.
Entre los muertos se encuentran 13 hombres y 7 mujeres, incluidos siete menores de edad reclutados por el grupo armado. Tras la confirmación, la Organización de Naciones Unidas expresó su “profunda preocupación” por el reclutamiento forzado de niños, recordando que las víctimas fueron llevadas a la guerra por un actor ilegal.
El operativo ha generado una nueva ola de críticas contra el Gobierno de Gustavo Petro, quien en el pasado fue un fuerte detractor de acciones similares realizadas por administraciones anteriores. Hoy, bajo su mandato, enfrenta el mismo escrutinio que en su momento exigía con vehemencia.












