La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), liderada por Carlos Carrillo, logró finalmente asegurar los 80 carrotanques destinados a abastecer regiones vulnerables como La Guajira. Tras meses de obstáculos y una licitación fallida, fue la aseguradora estatal La Previsora S.A. quien asumió el reto, firmando un contrato por $1.600 millones para garantizar la operación de los vehículos.
Un problema heredado de la administración anterior
Cuando Carrillo asumió la dirección de la UNGRD, enfrentó no solo la sombra de un escándalo de corrupción que comprometió la reputación de la entidad, sino también tareas urgentes como la puesta en marcha de los carrotanques. Estos vehículos, adquiridos durante la gestión de Olmedo López, se habían convertido en un símbolo de irregularidades y mal manejo administrativo, situación que incluso alcanzó al exministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
Sin embargo, los carrotanques permanecieron inmovilizados en una base militar de Uribia durante 11 meses debido a la falta de seguros, un requisito indispensable para su circulación. Convencer a las aseguradoras privadas resultó una misión casi imposible para Carrillo, quien se encontró con un marcado recelo por parte del sector.
La Previsora S.A., la única que dio un paso al frente
Tras varios intentos infructuosos, la única compañía que respondió al llamado fue La Previsora S.A., una aseguradora estatal perteneciente en un 99,7% al Grupo Bicentenario y adscrita al Ministerio de Hacienda. Bajo la dirección de Ramón Guillermo Angarita Lamk, esta empresa firmó un contrato que incluye coberturas como responsabilidad civil extracontractual, pérdida total o parcial por daños o hurto, actos malintencionados de terceros y desastres.
Este acuerdo no solo destrabó la situación, sino que permitió que los vehículos comenzaran a operar, marcando el cierre de lo que Carrillo calificó como “un capítulo oscuro de la historia de Colombia”.
La intervención de Fasecolda, un paso crucial
El camino hacia la solución no fue sencillo. En septiembre, la UNGRD abrió una licitación en busca de aseguradoras interesadas, pero al no recibir propuestas, Carrillo optó por acudir directamente a Fasecolda, el gremio de las aseguradoras en Colombia. Con el apoyo de su presidente, Gustavo Morales, y bajo la supervisión de la Contraloría, se llevaron a cabo mesas de diálogo que permitieron reactivar el proceso de licitación y, finalmente, concretar el acuerdo con La Previsora S.A.
Un paso adelante para la UNGRD
Con este logro, Carlos Carrillo no solo logra avanzar en la misión de llevar agua a regiones vulnerables, sino que también da un respiro a la UNGRD en su esfuerzo por recuperar credibilidad tras los escándalos del pasado. Los 80 carrotanques, asegurados y listos para operar, representan un avance en la gestión del riesgo y el abastecimiento en zonas afectadas, cerrando así una etapa de incertidumbre y estancamiento.