El superintendente nacional de Salud, Giovanny Rubiano García, ha designado siete nuevos agentes interventores para las Entidades Prestadoras de Salud (EPS) bajo medida de intervención. Este cambio se da tras la salida del exsuperintendente Luis Carlos Leal, quien dejó el cargo en medio de un escándalo por presunta corrupción. Sin embargo, cinco de los nuevos designados no cumplen los requisitos establecidos para ejercer estas funciones.
Según la normatividad, los interventores deben estar inscritos en el Registro de Interventores, Liquidadores y Contralores (Rilco) de la Superintendencia Nacional de Salud, un repositorio que certifica la idoneidad y experiencia de los profesionales. Al revisar esta base de datos, se evidenció que varios de los nombrados por Rubiano no figuran en el registro. Entre ellos están:
Kemer Ramírez Cárdenas, designado como interventor de Sanitas.
Gloria Libia Polanía Aguillón, asignada a Asmet Salud.
Gabriel Enrique Castilla Castillo, encargado de Emssanar EPS.
Bernardo Armando Camacho Rodríguez, elegido para Nueva EPS.
Diana Constanza Rodríguez Posso, nombrada para Savia Salud EPS.
Esta situación genera preocupación, ya que el futuro de las EPS, encargadas de garantizar servicios de salud a casi la mitad de la población colombiana, está ahora en manos de agentes que no cumplen con los lineamientos requeridos.
La crisis no es nueva. Bajo la dirección de Luis Carlos Leal, también se designaron interventores que no estaban registrados en el Rilco. Esto ha planteado dudas sobre los procedimientos internos de selección y la transparencia en la gestión de estas entidades.
El panorama plantea un desafío para la Superintendencia de Salud, que enfrenta la presión de garantizar una administración eficiente y transparente en un sector crítico para los colombianos.